El COVID-19 ha puesto de cabeza a múltiples economías, mercados y empresas. El nivel de riesgo de la situación aunado a la duración que se prevé que tenga, supone una serie de desafíos para reanudar con éxito las actividades laborales dentro de las oficinas.
Según estudio realizado por la UNAM, el 85% de las organizaciones mexicanas no tienen las condiciones adecuadas para que su personal tenga un balance entre vida personal y trabajo, lo que les representa un gran reto ante la eminente aplicación de la NOM-35. Para ello, lo mejor es buscar la asesoría de una firma experta en este ámbito, que oriente y ayude a integrar toda la evidencia necesaria para evitar multas, suspensiones o clausuras.
Recientemente, GAYA realizó una alianza con tres empresas para ofrecer un servicio completo para el regreso a la nueva normalidad. Se trata de especialistas en salud física (Viive), psicológica (Deriva) y legal (Zenteno & Liramora).
Tomar acción en cada uno de estos ejes, permitirá desarrollar una estrategia sólida y oportuna para incorporar exitosamente a la organización en la nueva dinámica laboral.