Dada la dependencia tecnológica que hoy en día las empresas tienen, es vital contar con un Data Center eficaz y confiable que les asegure que sus operaciones podrán desarrollarse sin complicaciones ni problemas.
Como es sabido, prácticamente toda la operación de una organización está basada en tecnologías de la información, las cuales, pueden contenerse en data centers ya sean propios, tercerizados o en la nube. Estos ayudan a que los procesos se lleven a cabo y por ello son de gran importancia.
Sin embargo, existen algunos aspectos que hacen que un data center pueda presentar problemas, entre ellos, que su diseño y construcción no esté alineada a los estándares globales y locales que la empresa requiere cumplir para dar sostén a sus operaciones.
La disponibilidad, la entrega de aplicaciones, información y comunicación son elementos críticos en los procesos de negocio de una empresa y cuando un data center presenta problemas, puede haber crisis internas que provoquen pérdidas tanto financieras como de tiempo.
Los data centers deben acatarse a ciertas características y estándares para que puedan diseñarse para tener una mínima probabilidad de downtime.
Entre los puntos críticos de estos estándares es que un data center debe estar diseñado para cumplir los diferentes objetivos que la compañía requiere, pues, de presentar problemas y requerir mantenimiento, muchos de ellos no pueden darse el lujo de detener su proceso.
Es importante comprender que los estándares pueden cambiar según la empresa y sus objetivos. Un data center se compone por 3 capas principales a nivel de infraestructura:
Cada una de estas capas requiere de diferentes estándares de seguridad, operación, administración, aplicativos, telecomunicaciones, entre más. Sin embargo, algunos de los principales tanto en Europa como en America se encuentran BICSI, ICREA y el más utilizado a nivel mundial es Uptime Institute que es el que define los Tiers del I al IV.
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Pero, como se ha mencionado, no hay un único estándar que intervenga en el diseño y la construcción de data centers, por lo que las buenas prácticas se colocan como una de las principales claves para desarrollar y tener data centers eficaces y adecuados para cada operación.
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Para que una empresa pueda asegurarse de tener un data center que funcione conforme a sus objetivos y necesidades, debe tomar en cuenta dos puntos importantes.
Es común pensar que un Tier IV, al ser un data center sofistificado, tiene menor probabilidades de tener afectaciones, pero esto no siempre es así. Lo que funciona para una empresa, puede que no funcione para otra y por ello, es vital comprender cuál es el objetivo que se persigue.
Por ejemplo, Tier I y Tier II son considerados data centers 5x8, lo cual se entiende que debe tener ventanas de tiempo para poder apagar el data center y llevar a cabo las actividades de mantenimiento a la infraestructura; mientras que los Tiers III y Tier IV, considerados data centers 7x24x365 cuenta con esta ventaja dentro de su diseño y construcción en donde el mantenimiento forma parte de la operación.
Cada uno de estos Tiers son funcionales y pueden cumplir los objetivos de una empresa, pero debe tomarse en cuenta el modelo de negocio, pues habrá operaciones que puedan detenerse algunas veces al año, mientras que habrá otras que no tengan permitido detenerse por ninguna razón.
Al comprender el objetivo que cumplirá el data center podrá determinarse qué tipo de Tier requiere una empresa y a partir de ello basar el diseño y la construcción.
Muchas empresas caen en el error de no considerar el tema operativo en el diseño y la construcción de su data center. Sin embargo, este aspecto juega un papel fundamental, pues el principal objetivo de un data center es operarlo y hacerlo funcionar correctamente.
Considerar la operación desde un principio brinda las herramientas y la infraestructura que permite tener un mínimo de downtime. En otras palabras: una empresa puede construir y diseñar un Tier IV, pero si éste no se opera de manera correcta, las probabilidades de que falle aumentan dada la complejidad que tiene una instalación de este tipo.
Además de garantizar un downtime casi nulo, el principal beneficio es contar con una operación confiable. Para ello, la capacitación y el buen manejo se vuelven fundamentales, pues la mayor cantidad de incidencias y caídas de data centers son causadas por error humano.
Si una empresa cuenta con personal capacitado y que conoce los principios del data center diseñado específicamente para ciertas necesidades y objetivos, los beneficios aumentan y la posibilidad de fallas se reduce a prácticamente 0% o pueden ser controladas y mitigadas desde la operacion.
Diseñar y construir un data center que cumpla con todos los estándares necesarios para su buena operación requiere de la sinergia de expertos como GAYA y Uptime Institute, el cual, es el responsable de certificar los data centers bajo el TIER Standard a nivel mundial. Con ambos esfuerzos, se logran alcanzar proyectos a la medida de diferentes objetivos que reduzcan los riesgos.
Trabajar de la mano con expertos como GAYA y Uptime Institute asegura a las empresas que sus data centers serán capaces de soportar las operaciones de su modelo de negocio, a través de un buen diseño y la infraestructura correcta que dará seguridad en su función.
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*Contenido realizado en colaboración con Uptime Institute