¿Existe una metodología para regresar a una oficina sanitizada? Aquí te decimos cómo

Algo es un hecho: la oficina que dejamos antes de la cuarentena no podrá ser la misma cuando regresemos a nuestras actividades regulares en ella. Y si bien aún no existe una metodología establecida por parte de las autoridades, es primordial que en este momento los dueños o directores de empresas comiencen a establecer los mejores procesos para regresar a una oficina sanitizada, tomando en cuenta las mejores prácticas internacionales.

La mayoría de los países se encuentran diseñando sus planes para el regreso a la oficina en fases. Por ejemplo, en Irlanda comenzó este 18 de mayo con su primera fase y progresará en periodos de 3 semanas. El corporativo de L’Oreal en Argentina también cree que la vuelta a las actividades debe ser paulatina, incluso están pensando dividir a sus colaboradores en dos grupos para alternar el trabajo presencial y el home office.

El distanciamiento entre colaboradores y el re-direccionamiento de escritorios o zonas de trabajo, son tan solo algunas de las medidas que se están adoptando. Sin embargo, la más importante será mantener una oficina sanitizada todo el tiempo. 

Pero, ¿en qué consiste la sanitización de oficinas? 

En esencia, este proceso consta de 4 puntos fundamentales: 

• Enjuague: donde se elimina el exceso de suciedad en las superficies.
• Limpieza: donde se aplican los agentes limpiadores. 
• Aclarado: donde se eliminan los restos de las sustancias jabonosas. 
• Sanitización: aplicación final de una sustancia sanitizante para reducir todas las bacterias y los organismos.

Sanitización y distanciamiento social: los mejores aliados en el espacio de trabajo post COVID-19

Es importante destacar que, aunque la prioridad es la sanitización y desinfección de los espacios de trabajo para eliminar la mayor parte de los microorganismos que existen en el medio ambiente, para lograr un cambio funcional en las oficinas también se deben crear campañas de concientización entre los colaboradores para fomentar la responsabilidad individual y colectiva.

Cambios tan simples como evitar los apretones de manos para saludar o tener demasiado contacto harán diferencias enormes. 

Y, ¿cómo lograr una oficina sanitizada? 

Si bien cada empresa optará por lo mejor para sus trabajadores, los siguientes consejos son los más recomendables para brindarles la máxima seguridad en su regreso:

1. 1. Sanitización continua

Para que una sanitización sea efectiva, ésta debe realizarse todos los días en la mañana y en la tarde para que los empleados entren y salgan de un espacio lo más desinfectado posible.

Aunque esta tarea puede resultar algo compleja, nuevamente lo mejor es concientizar al personal de que ellos también deben hacerse responsables de mantener una buena higiene en los espacios de trabajo.

La limpieza de las herramientas de trabajo como computadoras, teléfonos, tabletas e incluso agendas debe ser obligatoria para que todos tengan la certeza de que sus espacios de trabajo son seguros y puedan trabajar tranquilamente. 

1. 2. Señales de circulación  

Las circulaciones en la nueva oficina post COVID-19 deben estar bien señalizadas, de modo que formen circuitos que eviten el cruce de personas en la medida de lo posible. 

1. 3. Modificaciones en el layout y las instalaciones

Algunos de los cambios que deben realizarse para tener espacios de trabajo sanitizados son los siguientes: 

• Aplicación de pintura antibacterial en zonas públicas de la oficina, preferentemente
• Colocación de mamparas de acrílico entre escritorios
• Ajustes en el aire acondicionado para cuidar la recirculación, filtrado y pureza del aire
• Adaptación de estaciones para surtir gel antibacterial, cubrebocas, guantes y caretas en caso de ser necesario 

Asimismo, la separación de escritorios y la alteración general de la distribución de espacios es fundamental para minimizar el contacto entre los colaboradores, respetando la sana distancia mínima de 1.5 m. 

1. 4. Cambios con anticipación 

La adopción de estos cambios sin duda será un gran reto para las empresas, pero tomando precauciones anticipadamente, podrán tener un regreso a la oficina mucho más organizado y productivo.

Es importante que las compañías tomen en cuenta que la sanitización de los espacios de trabajo es una tarea que debe hacerse constantemente para brindar seguridad y tranquilidad a los empleados.

Complementando el punto anterior, cambiar el layout y la circulación de las oficinas puede llevar aproximadamente entre una semana y 15 días. Esto dependerá del tipo de oficina que se tenga y del número de personas que regresarán a ella. 

1. 5. Solo tareas esenciales

Sin duda, una oficina física siempre es necesaria para dar sentido de pertenencia a los colaboradores. Pero, gracias a esta cuarentena, también pudimos darnos cuenta que hay actividades como juntas o reuniones que funcionan a la perfección de manera digital. 

Como ya lo mencionamos, todos estos cambios pueden ser graduales, pero de inicio, se recomienda que no regrese “de golpe” todo el personal hasta que se tenga la seguridad de que es lo mejor para todos.

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