Si bien aún existe mucha incertidumbre alrededor de cómo será el regreso a las oficinas y las dinámicas laborales del futuro, de lo que podemos estar completamente seguros es que el diseño de oficinas se enfrenta a una profunda transformación para ser reinventado.
Indudablemente, uno de los aprendizajes más importantes que nos dejó el 2020 en materia de formas de trabajo fue que el espacio físico de las oficinas ha dejado de ser fundamental. Desde luego, aunque continuará siendo un elemento importante, ya no será algo imprescindible para poder colaborar con nuestros equipos de trabajo.
En segundo lugar, nos encontramos con que, si la tecnología antes era importante, hoy por hoy, lo es aún más. De acuerdo con el World Economic Forum, el mundo avanzó 10 años tecnológicamente hablando, a raíz de la pandemia.
Ante ello, las empresas necesitan asegurarse de contar con herramientas de última generación, haciéndolas accesibles a todos sus colaboradores para mantener una comunicación continua y ser eficientes en sus actividades.
A pesar de que varias compañías han visto un aumento en la productividad de sus empleados trabajando vía remota gracias al mejor enfoque de esfuerzos y a la eliminación de desplazamientos o tiempos muertos, lo que está sucediendo es que resulta algo difícil que los colaboradores absorban la cultura de su empresa estando todos diseminados.
Si bien es cierto que los pronósticos indican que la modalidad del trabajo a distancia seguirá creciendo, es innegable que los seres humanos somos seres sociales por naturaleza. Por ende, nuestra necesidad de interactuar con los demás no cesará, aún cuando los modos de interacción estén cambiando.
Admitámoslo, las reuniones en Zoom, Teams o Meet no se comparan a la convivencia humana a la cual estamos acostumbrados. En ese sentido, los espacios de trabajo físicos fomentan un mejor ambiente para construir la sólida comunidad empresarial que las organizaciones necesitan.
Es por ello que las oficinas no dejarán de existir, más bien, tendrán que reinventarse y redefinir su uso.
Siguiendo la línea de reinvención y añadiendo todo lo vivido y aprendido hasta ahora, se espera que el diseño de oficinas post COVID-19 contemple las siguientes características:
Asimismo, una de las tendencias más fuertes en relación al futuro del diseño de oficinas en la era post COVID-19 es que, a medida que pase el tiempo, las fronteras entre vivir y trabajar irán borrándose hasta llegar a una fusión completa de espacios, donde se desarrollará un “hábitat integral” que no solo abarcará ambos campos (laboral y vivienda), sino que también incluirá el ámbito recreacional, educacional, comercial ¡y más!
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De esta forma, los CEOs deben comenzar a tomar medidas para que sus compañías encajen con la nueva visión de las oficinas post COVID-19. Entre ellas, no pueden faltar:
¿Qué te ha parecido? ¿Tu compañía está preparada para recibir estos cambios?
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